Torreón, Coahuila. – Durante su tercer informe de gobierno, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), habló de los feminicidios y reconoció que han ido a la alza durante su administración.
A decir de Ariadne Lamont, directora de Incidencia y Acompañamiento a Víctimas del Instituto de Formación, Investigación y Consultoría de Género y Derechos Humanos (INCIDE FEMME), es bueno que haya abordado eso, pero le faltó toda la violencia que se vive al interior de las casas y que ha repuntado durante la contingencia.
“Con los niños, las niñas y las mujeres, y que sí aumentaron en esta pandemia. Así como mencionó el feminicidio, debió haber mencionado los delitos sexuales”.
Faltó dar cuenta, manifestó, que los hombres están violando a sus hijos, hijas, sobrinos y sobrinas.
“Y a sus nietas y a sus hijastras”.
En ese contexto, aseveró que ahora que regresaron a las escuelas se van a empezar a revelar casos de abuso y que la autoridad debe ver la manera en que los atenderá y resolverá.
“Desde el punto de vista psicológico y legal, además de todo lo que necesiten para su atención porque es una población muy vulnerada”.
Si bien, se trata de delitos del fuero común, que no corresponden a la Federación pues tocan a los estados, López Obrador debió admitir lo siguiente:
“Que como nación no ha podido erradicar los delitos sexuales en contra de los infantes”.
Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México es el primer lugar mundial en abuso sexual infantil.
Cada año, de acuerdo a lo registrado, más de 4.5 millones de niñas y niños son víctimas.
Sin embargo, la cifra es poco realista, pues se estima que solo uno de cada 10 casos se denuncia.
NUMERALIA
4.5 millones de niñas y niños son víctimas al año.
DATO
México es primer lugar mundial en este tipo de delito.