Torreón, Coahuila.- Además de continuar con su apuesta por las energías limpias, renglón en el que al haberse destacado como una de las empresas pioneras en México ha logrado avances importantes, tanto que cerca del 35 de sus operaciones se sustentan con la fuerza proveniente de fuentes renovables, Industrias Peñoles se prepara para enfrentar un nuevo reto dentro d la lucha global por la reducción de las emisiones de efecto invernadero, ahora con base a nuevas disposiciones oficiales que a nivel federal entrarán en vigor a partir de enero del próximo año.
El tema al respecto lo abordó Arturo Vaca Durán, Director de Energía de la importante empresa minero-metalúrgica, al impartir este jueves una conferencia en la que empezó precisamente por compartir los logros que ha alcanzado Industrias Peñoles en materia de una cada vez mayor eficiencia energética.
Se cumplieron así los objetivos de la Segunda Reunión de Especialistas en Medio Ambiente adscritos a las 25 unidades operativas con las que cuentan Peñoles y Fresnillo PLC, distribuidas en 10 estados del país.
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En su exposición, Vaca Durán destacó que ya para el 2018 entre el 32 y el 35 por ciento de la energía que utiliza Peñoles en sus operaciones en todo el país, provenía de fuentes renovables, y se avanza hacia el cumplimiento de la meta que contempla que para el año 2020 el índice se eleve al 50 por ciento, con miras a alcanzar el 100 por ciento en el año 2028.
Hizo notar que los avances que se tienen en la materia se desprenden de la realización de proyectos que para la generación de energía limpia ha concretado Peñoles, entre los que destacan los parques Fuerza Eólica del Istmo en Oaxaca, Eólica de Coahuila y Mesa la Paz, este último aún en proceso de habilitación en el estado de Tamaulipas.
Por lo que respecta al nuevo reto que se debe enfrentar, explicó que el Gobierno Mexicano ha diseñado una especie de mercado de emisiones, un mecanismo que va a entrar en vigor desde el inicio del próximo año, así que “tenemos que prepararnos todos primero para proporcionar la información, averiguar qué cuota de emisión nos van a asignar, para tratar de quedar abajo, y sobre todo abrir nuevos proyectos de reducción de emisiones para participar de la mejor y debida forma en este mercado”
Con esto a nivel mundial se da un paso más allá de lo que fueron los bonos de carbono, bajo un esquema que planteaba que todos los países adoptaran las mismas medidas y criterios. Ahora, con el aval de la ONU está vigente un acuerdo que determina que cada país se ponga una meta y la anuncie públicamente, a fin de tratar de cumplirla a partir del diseño y aplicación de sus propios instrumentos, que es lo que ahora se está haciendo en México.
En ese sentido, Arturo Vaca asegura que está preparados para entrar y participar, en el entendido de que, “tenemos que acelerar el paso y encontrar más proyectos de reducción de emisiones. Hasta ahora nuestro mayor logro había sido en el uso de las energías renovables, y ahora tenemos que hacer modificaciones a nuestros procesos, como por ejemplo cambiar de vehículos de transporte de gasolina y diésel a los eléctricos, o usar el gas natural licuado, entre otras cosas”. Dejó en claro que los primeros proyectos, aunque no de tanto alcance, podrían tardar en concretarse dos o tres años, mientras que lo de mayor impacto implican un plazo aún mayor.
