El alcalde Jorge Zermeño Infante llamó al Instituto Municipal de Planeación y Competitividad (IMPLAN) a respaldarse de algunas instituciones universitarias de la región para poder realizar un estudio serio que recoja de manera objetiva la opinión de los laguneros respecto a la intención de cancelar o no la continuidad del proyecto del Metrobús para las vecinas ciudades de Gómez Palacio y Lerdo.
El llamado lo hizo dentro del marco de la sesión de trabajo del consejo directivo del IMPLAN celebrada ayer, donde reiteró su opinión en el sentido de que no es con la demagogia, la manipulación y menos con una consulta a mano alzada como se debe tomar una decisión definitiva al respecto.
“Hagan una encuesta seria, pero háganla completa”, destacó al referirse además a la necesidad de un estudio general en materia de movilidad urbana, que reporte las condiciones bajo las cuales actualmente se presta a los laguneros el servicio de transporte, y recoja la opinión de los ciudadanos sobre si el citado proyecto que tiene avances importantes en Torreón y Matamoros debe continuar o no en Gómez Palacio y Lerdo.
No se valen consultas que se hagan de manera mañosa
Jorge Zermeño Infante, presidente municipal de Torreón
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El edil, considera que nunca será válido que cuando se consulte a la ciudadanía se intente desde un principio inducir el sentido de las respuestas, como por ejemplo al preguntarle a la gente si prefiere servicios de salud o que se traiga a la región agua desde las presas antes que hacer realidad el Metrobús en La Laguna de Durango.
Recordó haber estado en Gómez Palacio el 16 de junio cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la cancelación de dicho proyecto luego de someter el asunto a la consideración de los asistentes, en un ejercicio que, sostiene, fue manipulado y se realizó de una forma mañosa.
Por otra parte, Zermeño Infante reconoció que por lo que respeta al transporte urbano municipal en Torreón, hace unos meses se autorizó un incremento en las tarifas de pasaje, que en lo general se elevó de 11 a 13 pesos, y no obstante nada se ha hecho por modernizar o mejorar el servicio.
En ese sentido, planteó que los concesionarios transportistas no han cumplido, pues no han comprado ni un solo autobús nuevo para sus rutas, en tanto que con la inconformidad motivada con el citado incremento y por la calidad del servicio le dejan “la bronca política” a la autoridad municipal.