Torreón, Coahuila.- De manera desesperada, César Iván Rodarte Félix busca a sus dos hijas, de tan solo dos años y de siete meses, las cuales fueron separadas de él por parte de la madre y no sabe nada de ellas.
La conoció en Torreón en un crucero vendiendo quesos y galletas con el nombre de Elizabeth Harder Thiessen, en el año 2016, iniciaron una relación, se casaron y tuvieron a la primera de las dos hijas.
Justo en ese momento le confesó que no era menonita y no se llama Elizabeth, que su nombre real era Nessttalee Blackmore LeBaron.
“Es una familia en la que tienen hijos entre ellos, donde hay abusos, donde practican el incesto y la poligamia. Ella me contó que había huido de ahí, pero cuando se volvió a poner en contacto con ellos, a partir de ahí, empezó mi martirio”.
En julio del año pasado, al llegar a la casa donde vivía con su ex pareja se percató se había ido con la niña de dos años y embarazada de la otra hija que estaban por tener, además de que faltaban muebles y solo le dejó el anillo de matrimonio.
Sin embargo, la comunicación seguía vía telefónica, cuando ella quería, conforme a sus tiempos y conveniencia, hasta que el 24 de agosto dejó de contestar.
“En varias ocasiones se fue a vivir con sus familiares, de la colonia LeBaron, es sobrina de Joel Francisco LeBaron Soto, quien se autodenomina el ´patriarca de la comunidad´, hermano de Adrián LeBaron y padre de Julián LeBaron, los activistas que andan ahorita”.
“Esa persona, Joel, desde hace dos años me amenazó de muerte porque le pedí ayuda para que hablara con sus sobrina porque ya empezábamos a tener problemas, no quería ponerle las vacunas a la mayor de mis hijas. He seguido recibiendo amenazas”.
El joven, de 26 años de edad, ya acudió a interponer la denuncia por sustracción, pero las autoridades solo se limitan a decir que ´las niñas están con su mamá´.
Es por eso que optó por hacer público el caso, primero en redes sociales y luego ante los medios de comunicación, pues, insistió, teme por la salud e integridad física y emocional de sus hijas.
“Yo quiero encontrar a mis hijas y saber que están bien. También lucharé por la guarda y custodia en lo que esto se resuelve, porque ella ha tenido más de un año a las niñas y no hecho las cosas correctas”.
DATO
Desde el 24 de agosto no sabe nada de ellas.