Torreón Coahuila.- En opinión del titular de la Dirección de Tránsito y Vialidad, Alejandro Gutiérrez Zamudio, es acertada la propuesta que han comenzado a promover representantes de la iniciativa privada en la intención de que a los automovilistas que sean sorprendidos conduciendo en estado inconveniente, además de enfrentar las sanciones que ya están contempladas en reglamento, se les obligue a realizar trabajo comunitario y a recibir capacitación en temas de civismo.
El funcionario considera que en aras de prevenir los accidentes que se desprenden de la irresponsable combinación del alcohol y el volante, cualquier esfuerzo adicional que pueda hacerse siempre será bienvenido.
En ese sentido, plantea que en realidad nunca bastará la aplicación de una sola medida para terminar con ese mal, de manera que es muy conveniente atender iniciativas como la que se plantea y otras más que puedan conjuntarse a favor de cada vez mejores resultados en materia de prevención.
Sus comentarios al respecto los compartió el funcionario luego de que recientemente la nueva directiva del Consejo Consultivo de Vialidad, organismo conformado por representantes de distintas cámaras y organismos empresariales, solicitaron abiertamente al gobierno municipal que se promueva una reforma al reglamento de movilidad vigente, a fin de que se agregue como nuevas sanciones para quienes sean sorprendidos conduciendo un vehículo después de haber ingerido bebidas embriagantes, la obligación de realizar algún tipo de trabajo comunitario y asistir por lo menos a un curso de capacitación, con la idea de que de esa manera pueden tomar mayor conciencia acerca de los riesgos a los que se expondrían ellos mismos y a otras personas en caso de que llegaran a reincidir en tan irregular conducta.
Gutiérrez Zamudio dijo que el mismo planteamiento ha tenido la oportunidad de escucharlo también en reuniones con empresario del sector restaurantero que se han ofrecido a colaborar a favor de las estrategias que estén al alcance de sus posibilidades para prevenir accidentes asociados con el consumo de alcohol.
Cabe señalar que actualmente el correspondiente reglamento municipal contempla la aplicación de sanciones por alrededor de los mil 500 y tres mil 500 pesos para conductores con aliento alcohólico y en estado inonveniente, respectivamente, en el entendido de que además este tipo de conductas están consideradas como un delito de carácter penal, lo cual no obstante no ha impedido que dejen de registrarse percances provocados por conductores ebrios, de ahí que se considere una buena opción la instrumentación de medidas adicionales como la que se plantea.