Torreón, Coahuila.- Al pie del monumento erigido en su honor, la vida y obra del presidente Benito Juárez fue homenajeada al conmemorarse el aniversario número 213 de su natalicio, durante una ceremonia que tuvo como centro el simbólico reencendido de la flama eterna dedicada a la memoria del bien llamado Benemérito de las Américas.
El solemne acto al que se sumaron activamente integrantes de las logias masónicas con presencia en la región, así como estudiantes de la escuela primaria Benito Juárez, fue presidido por el alcalde Jorge Zerneño Infante y contó con la presencia de otros servidores públicos y representantes del Ejército Mexicano.
En la ceremonia que tuvo lugar en la plazuela Juárez, integrada al complejo de la Plaza Mayor, se hizo notar la presencia de la maestra Manuela González Sosa, hija de Florentino González Díaz, el creador de la flama eterna que desde marzo de 1952 alumbra el monumento dedicado al insigne personaje, mismo que se construyó en el año de 1915.
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Antes de que autoridades y representantes de hermandades adheridas a la Gran Logia Benito Juárez del Estado de Coahuila montaron guardias de honor, el alcalde Jorge Zermeño Infante hizo uso de la palabra para exaltar los méritos de un gobernante que abolió privilegios injustificados e intervino para que el registro civil no siguiera en manos del clero, además de luchar contra la imposición de un emperador europeo y siempre pugnar a favor por la soberanía nacional.
Destacó así mismo que ante el legado que nos plantea que todos tenemos que respetarnos en nuestras libertades y derechos para que las sociedades vivan mejor, no es casualidad que en todas las ciudades del país las principales avenidas y escuelas llevan el nombre de Benito Juárez, donde se honra así su trayectoria, enseñanzas y valores.
