El gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís reiteró que al final de su gestión quedará terminado al cien por ciento su plan sexenal en materia de obras públicas, en el entendido de que aquellos trabajos que aún se encuentran en proceso corresponden a proyectos que no estaban originalmente contemplados y, aun así, deberán llegar a feliz término para que sean las próximas autoridades estales las encargadas de entregarlas formalmente.
“No dejaré obras tiradas, si acaso algunas en proceso que ya no le tocará a mi entregarlas, pero que deberán quedar debidamente terminadas”, dijo, y reconoció que en el caso particular de La Laguna el único pendiente que dejará para que pueda concretarlo el nuevo gobierno estatal es el correspondiente al proyecto del Metrobús Laguna, que se encuentra ya muy avanzado.
Luego de presidir la reunión semanal del Subcomité Regional de La Laguna, el mandatario comentó que se prepara ya para cerrar su actual gestión pública, y que como parte de ello se atienden ya actividades correspondientes a un fluido proceso de entrega-recepción que habrá comenzar a cobrar formalidad en unos días más, en tanto que ya comenzaron a distribuirse las invitaciones para el que será su sexto y último informe de gobierno, programado para el 9 de noviembre en la sede del Congreso del Estado.
En relación con el proyecto Metrobús, reconoció que se tienen aún muchos obstáculos para que el mismo pueda funcionar bien como negocio, pero tiene claro que a fin de cuentas podrá retomarlo el gobernador electo Manolo Jiménez Salinas para poder concretarlo.
Dijo que a favor de ello está el hecho de que oportunamente se realizaron ya inversiones para preparar el sistema, donde lo más costoso fue construir el carril de concreto a todo lo largo del todo el corredor, así como las estaciones a lo largo de la rutas troncal, mismas que deberán recibir mantenimiento mientras que otras se tendrán que construir al paso del tiempo.
El Gobernador recordó que lo que queda es concretar la adquisición de los autobuses necesarios, lo cual corresponderá a los transportistas involucrados, después de que derivado de la pandemia el sistema BRT no era negocio como para poder solicitar los vehículos a crédito con el soporte de un fideicomiso.
“Hoy que las circunstancias ya son adecuadas, la construcción del fideicomiso ha sido muy lenta, se deben aplicar fondos bipartitas, lo cual ya no le alcanzará hacerlo a la actual administración, pero el corredor está hecho y la inversión que está llegando necesita un nuevo sistema de transporte”, agregó.
En cuanto al tema general de la proyección sexenal de obras públicas, Riquelme mencionó que todo lo planeado quedó terminado ya al cien por ciento, y lo que faltará de entregar antes de que deje la gubernatura son obras que al inicio no estaban contempladas y no obstante se iniciaron y hoy presentan avances importantes, entre estas el Cuartel de la Policía estatal en Saltillo y el Cuartel de Villa Unión, que ya la nueva administración tendrá la oportunidad de entregarlos debidamente equipados.
Otra de las obras actualmente pendientes es la construcción del nuevo edificio de la Presidencia Municipal de Francisco I. Madero, misma que presenta ya un avance del 96 por ciento, de manera que en el transcurso de las próximas semanas podrá entregarla personalmente de manera formal.