Para mejorar la imagen urbana del centro histórico al reducir la contaminación visual, junto con los postes que lo soportan, desaparecerá todo el tendido de cableado aéreo eléctrico y de telecomunicaciones existente en lo que será el Corredor Matamoros.
Si bien las primeras acciones para ello ya están en marcha, la propuesta concreta ya fue presentada ante funcionarios tanto de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) como de la empresa Teléfonos de México, quienes mostraron su buena disposición para colaborar a favor del objetivo planteado.
Juan Adolfo Von Bertrab Saracho, titular de la Dirección de Obras Públicas en Torreón, quien informó lo anterior, recordó que el proyecto de remodelación integral de espacios públicos para crear el Corredor Matamoros, contempla que entre otras cosas que se coloquen a nivel subterráneo todos los cables eléctricos, de telefonía y fibra óptica que pasan por la zona, así como los correspondientes al servicio de televisión por cable.
De hecho, para ese fin ya se realizan en un primer segmento de la avenida Matamoros los trabajos de inducción necesarios para dejar disponible para las empresas responsables de dichos servicios, una especie de zanja bien acondicionada para que sin mayores complicaciones lleguen a instalar su nuevo cableado.
El funcionario refiere que lo ideal sería que en todo el Centro Histórico de Torreón sustituirse con instalaciones subterráneas el cableado aéreo que genera serios problemas de contaminación visual, a favor de lo cual los trabajos en marcha en la avenida Matamoros de hecho son un buen comienzo.
Por otra parte, hizo saber que la ejecución de los trabajos correspondientes al Corredor Matamoros presenta ya un primer avance de un 10 por ciento, acorde a la planeación establecida en el correspondiente contrato de obra.
Recordó que el proyecto consiste en remodelar el tramo de la avenida comprendido entre la calzada Colón y la Plaza Mayor, donde quedan dos carriles de circulación, uno de estacionamiento en paralelo, una ciclovía y banquetas de alrededor de cinco metros de ancho, todo esto dentro de un área debidamente señalizada que contará con elementos ornamentales, espacios con sombra, bancas de descanso y una reforestación adecuada para crear un ambiente atractivo y seguro para los peatones.