Torreón, Coah.- Luego del escándalo en el que se vio envuelto por el contenido de información difundida inicialmente en redes sociales para hacerlo aparecer como un conductor alcoholizado responsable de un grave accidente automovilístico, el titular de la Dirección de Inspección y Verificación Municipal del Ayuntamiento de Torreón, Rolando Anaya Araujo, dio la cara para ofrecer su propia versión de lo que, asegura, realmente ocurrió.
Lamentó que haya quienes estén ocupados en difundir información “de mala leche” con la intención de desprestigiarlo, al sostener de manera categórica que no había consumido bebidas alcohólicas cuando desafortunadamente se vio involucrado en un percance, como cualquier otro, ocurrido el sábado a las siete de la tarde en la parte baja del Distribuidor Vial Alianza, donde por fortuna no hubo personas lesionadas y solamente se reportaron daños materiales que no resultaron ser de consideración.
Aseguró que, contrario a lo que se ha intentado hacer creer a la gente, sí acudió al lugar del percance personal de Peritos a recoger el reporte correspondiente, y él mismo tuvo que acudir posteriormente al Tribunal de Justicia Municipal para asumir su responsabilidad por lo sucedido, en el entendido de que si nunca estuvo detenido fue porque no conducía ebrio y porque a través de la correspondiente póliza de seguro se pudieron cubrir sin problemas los daños.
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Sobre lo sucedido, narró que, al concluir la participación del personal a su cargo en una más de las brigadas intensivas de limpieza en espacios públicos, acudió a supervisar la devolución de la herramienta que facilitó la Dirección de Servicios Públicos en una bodega contigua a la Unidad Deportiva Compresora, y al regresar, “por una confusión mía efectivamente circulé en sentido contrario por debajo del distribuidor, y tuve el percance con el camión de pasajeros”.
Por fortuna, agrega, debido a la baja velocidad de ambos vehículos, sólo se produjo un “recargón” del automóvil con el autobús, por lo que los daños fueron mínimos, aclarando que “no iba en estado de ebriedad y no hubo lesionados como se llegó a especular”.
Habló asimismo de que el vehículo que conducía es una unidad oficial, propiedad del Ayuntamiento de Torreón, que tiene asignada las 24 horas del día para el desarrollo de sus actividades como director de Inspección y Verificación, cuyo personal labora en turnos con distintos horarios.