Torreón, Coahuila.- Un grupo de 30 personas que laboraban para la empresa Riviera Minerales, se manifestaron en contra de la misma, luego de ser despedidos injustificadamente desde el pasado mes de abril, negándose el patrón a liquidarlos conforme lo establece la ley, denunciando además los afectados, que trabajaban en situación de riesgo, pues no había las debidas medidas preventivas y por si fuera poco, no contaban con seguro social.
Para este lunes por la mañana, los inconformes se apostaron de manera pacífica en las afueras de la referida empresa, misma que se ubica sobre la entrada principal del ejido San Agustín, explicando Manuel de Jesús Dávila Castruita, uno de los afectados, el porqué de su molestia y la exigencia de un pago justo:
“Estamos pasando por una situación difícil y el patrón después de servirse de la clase obrera, opta por despedir de manera injustificada a los trabajadores, esto desde principios de abril, simplemente nos hablaron en la oficina y sin ningún argumento nos avisan que estamos despedidos”.
“Por si fuera poco, a gente que tenía dos años trabajando los quieren liquidar con 600 pesos. Nosotros lo único que pedimos es que se nos liquide conforme a la ley, es todo lo que queremos”.
Acompañando a los empleados despedidos estuvo el Licenciado Francisco López, con amplia experiencia en este tipo de casos, quien mencionó que la ley respalda al trabajador en esta situación, por lo que buscará por todos los medios que reciban una liquidación justa:
“No obstante que el mensaje que manda el presidente de la república a los empresarios por la contingencia es muy claro, de no despedir gente, pues aquí el patrón está dejando a 30 familias sin comer, es anticonstitucional, aquí el artículo 427, 429 de la Ley Federal del Trabajo es muy claro al respecto, no deben despedir ahorita empleados por la contingencia”.
Otro punto que señalaron los manifestantes, fue el de las condiciones de riesgo en las que laboraban, pues tenían que andar a alturas de más de 10 metros sin ninguna medida de seguridad, además de que no estaban afiliados al IMSS, ni contaban con algún servicio que cubriera los gastos médicos en caso de accidente.