Que pueda llegar a concretarse el proyecto Agua Saludable para La Laguna (ASL) dependerá de que quienes de una u otra manera se han opuesto a la realización de las obras y procedimientos necesarios para ello se decidan finalmente a modificar su postura para otorgar su confianza y respaldo a las autoridades, como lo solicitó abiertamente el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, quien especialmente se refirió a la necesidad de que desistan de sus intenciones quienes promovieron un juicio de amparo en contra de esta iniciativa, al destacar que él no confía en lo absoluto en el Poder Judicial que, dijo, “desgraciadamente está podrido”.
Sus comentarios al respecto los compartió el mandatario al reunirse este domingo con campesinos, ambientalistas y otros actores de la sociedad que consideran que hay alternativas que deben abordarse para resolver la necesidad de agua saludable, libre de arsénico y en cantidad suficiente para los laguneros. Les pidió tomar un tiempo considerable para analizar la situación a fin de, juntos, tomar una decisión definitiva al respecto el domingo 3 de octubre, cuando regresará a La Laguna para reunirse nuevamente con ellos, en espera de que para entonces lo relacionado con el referido amparo ya haya quedado resuelto y pueda generarse un consenso favorable.
Para ello, pidió el apoyo de los gobiernos de Coahuila y Durango para que junto con los alcaldes de la región abran un debate incluyente en el que se recojan las propuestas e inquietudes de todos quienes deseen participar, con la intención de finalmente construir un consenso en favor del proyecto.
Acompañado por los gobernadores José Rosas Aispuro, de Durango y Miguel Ángel Riquelme Solís, de Coahuila, así como por los alcaldes de los municipios que se busca beneficiar con el proyecto y por el presidente del Grupo Lala, Eduardo Tricio Haro, López Obrador solicitó el respaldo para ASL. Reconoció que la oposición que se ha advertido en este caso es legítima, y no obstante “queremos convencerlos o persuadirlos de que sería lamentable que el proyecto no pudiera realizarse. Vengo a decirles que no hay afectación al medio ambiente. Que no haríamos nada que afectara al medio ambiente”.
Asimismo aseguró que, al construir una derivadora y potabilizadora en el Río Nazas, no se quedarían sin agua los productores porque se les va a respetar su dotación para riego, y además se va a invertir para tecnificar las tierras de cultivo para que con menos líquido puedan producir lo mismo o más, en tanto que en las ciudades involucradas se reparará todo el sistema de conducción para evitar fugas y aprovechar mejor el recurso hídrico.
NO HABRÁ HUACHICOL DE AGUA EN LA LAGUNA
El presidente expuso que en otros tiempos había la desconfianza de que unos acaparaban el agua y dejaban sin ella a la gente, y que sólo los influyentes podían tenerla, para asegurar que eso no ocurre más porque “ya no son los tiempos en los que el gobierno estaba supeditado al servicio de minorías. Mi único amo es el pueblo, no soy un sirviente de potentados. Como presidente represento a ricos y pobres y tengo como encomienda no permitir injusticias, luchar siempre por la igualdad”.
En ese sentido, planteó que se cuidará que no haya privilegios, y que no haya “huachicol” en el uso del agua, de manera que se evitarán abusos, y “vengo a decirles que es un buen proyecto para beneficio de todo el pueblo, que no se perjudica a nadie y es de los más nobles que pueda haber”.
En otra parte de su mensaje subrayó que sería muy lamentable iniciar una obra que luego al final del sexenio quedara sin terminar: “No quiero que a los nuevos gobernantes les pase lo que a nosotros que recibimos cientos de obras inconclusas que estamos terminando y habrá otras que no las podremos continuar”.
Por lo que respecta a Agua Saludable para La Laguna, Andrés Manuel López Obrador se dijo convencido de que con amparos de por medio el proyecto no se podrá llevar a cabo. De ser así, llegado el momento “lo más honesto será decir que no se va a poder y utilizamos los recursos para otras necesidades, y no meternos en algo que nos vaya a afectar”.
Fue aquí donde se refirió a la necesidad de que se dé marcha atrás al juicio de amparo que promovió la asociación ProDefensa del Nazas, al argumentar que el proyecto infringe disposiciones legales al contemplar realizar obras que impactan gravemente al medioambiente en la zona natural protegida del Cañón de Fernández.
AMLO DESCONFÍA EN EL PODER JUDICIAL
En este tema, el jefe del ejecutivo federal manifestó que el no puede confiar en el Poder Judicial porque está podrido. Habló de que “hay excepciones, pero jueces, magistrados y ministros están al servicio de intereses creados y tienen una mentalidad ultra conservadora”.
Agregó que si se tuviera un Poder Judicial confiable, no habría problema en entrar en un litigio, mas “si nos metemos en eso ya nos entramparon, nos presentan una denuncia y otra, y otra y se nos va el tiempo, es una táctica dilatoria y no se hace la obra, aun cuando ya hay hasta licitaciones”. Por esto, reiteró: “Vengo a que nos ayuden, y a que decidamos entre todos”.
Además, mencionó que se debe procurar no caer en una trampa porque “hay gente que está dedicada a la politiquería y en todo esto hay muchas hipocresía de quienes dicen que apoyan, pero al mismo tiempo están sonsacando o ‘cuchileando’ a que haya oposición y se pongan amparos, en un doble discurso o doble moral”.
AGUA SALUDABLE PARA LA LAGUNA NO AFECTARÁ MEDIO AMBIENTE
Previamente, al principio de la reunión el titular de la Comisión Nacional del Agua, Germán Martinez Santoyo, hizo una amplia explicación en la que destacó, principalmente que el proyecto en cuestión no traerá consigo afectaciones ambientales porque las obras propuestas no se realizarán dentro de la zona nuclear del Cañón de Fernández, en el Río Nazas, mientras que por otra parte los productores del sector agropecuario seguirán contando con el recurso hídrico necesario para el desarrollo de sus actividades, para lo cual además se invertirá en la tecnificación de sistemas de riego y en la rehabilitación de canales.
Como ya se ha informado, con una inversión superior a los 10 mil millones de pesos se pretende construir la infraestructura necesaria que, a partir del año 2023 dotará de agua de calidad suficiente, proveniente de la presa Francisco Zarco, para nueve municipios laguneros, cuatro de ellos del estado de Durango y cinco de Coahuila, donde la intención es beneficiar de manera directa a un millón 600 mil personas que de esta manera dejarán de consumir el líquido proveniente del subsuelo, donde al paso del tiempo se ha acentuado cada vez más las altas y nocivas concentraciones de arsénico.
CONAGUA APOYARÁ TECNIFICACIÓN DEL RIEGO EN LA LAGUNA
Germán Martínez Santoyo puntualizó que también se trabaja con el Distrito de Riego 017, con cuyos representantes se reunió hace unos días para explorar mecanismos que impulsen la tecnificación y modernización del riego, lo cual llevará a incrementar la producción con menos uso de agua.
En ese sentido, informó, se convino con algunos módulos de ese distrito de riego establecer un sitio para impulsar esta tecnología, en el cual se regarán 2 mil 362 hectáreas, con una inversión de casi 319 millones de pesos en una primera etapa. Asimismo, se inició el mantenimiento de canales, con una inversión superior a los 42 millones de pesos.
Recalcó que, al igual que en el proyecto de la presa El Zapotillo, en Jalisco, en Agua Saludable para La Laguna se retoma el postulado del presidente López Obrador de que nada se hará por la fuerza sino con base en la razón y el derecho.
Finalmente, invitó a la sociedad a tomar en cuenta que de la implementación de este proyecto depende asegurar el agua en cantidad y calidad que la población requiere, así como, en buena medida, el desarrollo de esta gran región.
