No habrá permiso municipal para que se instalen en el periférico tuberías de gran capacidad del sistema Agua Saludable para La Laguna (ASL) sin que antes se presente para ello un detallado plan de acción y de logística que permita a las autoridades tomar las previsiones necesarias ante posibles afectaciones en infraestructura y sobre todo en materia de seguridad vial.
No obstante, no se descarta que, por tratarse de una obra impulsada por el gobierno federal, aun sin dicha autorización en un momento puedan iniciarse los trabajos que contemplan instalar una línea de 2.5 kilómetros con tubería de 54 pulgadas de diámetro sobre el cuerpo lateral sur de la importante vialidad, y de darse el caso, al momento en que en consecuencia comiencen a presentarse afectaciones en la movilidad, la infraestructura y a la ciudadanía, tendrían que suspenderse, advirtió el titular de la Dirección General de Obras Públicas en Torreón, Juan Adolfo Vonn Bertrab Saracho.
“Lo que no vamos a permitir, y eso lo digo de manera personal como director de Obras Públicas, es que inicien los trabajos si no hay un proyecto definido en cuanto a la logística técnica a seguir”, manifestó de manera puntual el funcionario.
Reconoció que desde que inició sus funciones el nuevo director de Cuencas Centrales del Norte de la Comisión Nacional del Agua (Cnagua), Juan Gabriel Riestra, la autoridad municipal logró establecer una buena comunicación con dicha institución para tratar los asuntos relacionados con ASL y otros de interés público, además de que él por su parte mantiene el diálogo con la empresa Dragados, S.A. de C.V., que trabaja en la instalación de la tubería de Agua Saludable en la margen derecha del Río Nazas y se dispone a continuar con la obra en su nueva etapa sobre el periférico. En ese sentido, dejó en claro que las exigencias y condiciones del gobierno municipal han sido planteadas de manera clara y con un buen entendimiento.
Respecto a por qué no se ha emitido la autorización municipal para la introducción de tuberías en el periférico, hizo saber que la parte interesada no ha terminado de entregar la documentación completa requerida en estos casos.
Aun así, agregó, “ellos son libres de hacer su trabajo, y el trabajo que hagan bienvenido, sin embargo, si van a afectar a un tercero como es en este caso la infraestructura vial de Torreón y a los usuarios, nuestra obligación es resguardar tanto la seguridad de los ciudadanos como la infraestructura”.
“No pedimos más que nos den un plan de ataque, donde se detalle cómo lo van a hacer, si se va a dañar alguna infraestructura, y en su caso cómo se va a remediar, y también el tema de la logística de vialidad, por ser el periférico una vialidad de una alta afluencia vehicular, es lo único que pedimos”, agregó.
En ese sentido, por ejemplo, con la debida anticipación se debe establecer el cronograma de los trabajos y cuantos carriles de la vialidad se van a afectar para poder desviar el tránsito de manera segura, y en general medir todos los posibles impactos e implicaciones, en el entendido de que “no podemos arriesgar nada en aras del trabajo, y es que va por encima la seguridad de los ciudadanos antes que la obra”