Torreón, Coahuila. – Si bien con el proyecto Agua Saludable para La Laguna (ASL) la intención es suplir con agua potabilizada proveniente del Río Nazas la que se extrae actualmente del subsuelo para cubrir las necesidades de consumo humano en nueve municipios de esta región, por lo que respecta a Torreón, llegado el momento la cancelación de los pozos de extracción y suministro deberá darse de manera gradual, en el entendido de que es probable que una parte de ellos deban mantenerse activos y otros por lo menos preparados para ser puestos en operación ante alguna emergencia técnica que así lo amerite.
Así lo planteó el gerente general del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (SIMAS), Juan José Gómez Hernández, al aclarar que la suspensión de las operaciones de la totalidad de los equipos de bombeo de los 90 pozos existentes en la ciudad, podría llegar a darse a partir del año 2023 sólo si se llega garantizar con el líquido que llegará desde la presa Francisco Zarco, la dotación completa que necesita esta ciudad, de 100 millones de metros cúbicos al año.
El funcionario no niega que lo ideal es que, como se tiene proyectado, dejen de funcionar todos o la mayoría de los equipos de bombeo que ahora abastecen del vital líquido a los torreonenses, lo que sin duda disminuirá de manera importante los costos de operación y de mantenimiento que cubre el SIMAS, y sobre todo en lo que tiene que ver en el pago correspondiente al necesario consumo de energía, que es bastante cara.
De cualquier manera, habrá que esperar a ver como se presentan las cosas una vez que concluyan las obras de Agua Saludable para La Laguna, cuyo inicio acaba de anunciarse, refiere Gómez Hernández, quien explica que “necesitamos aproximadamente 100 millones de metros cúbicos por año, y sin nos dan 50 o 60 tendríamos que suplir la diferencia con la operación de pozos de bombeo”.
En cuanto a la necesidad y conveniencia de dejar activos o al menos preparados una parte de los equipos de bombeo actuales, plantea que “algunos van a seguir en uso, y en el momento en que pase que no llueva o que suceda una falla eléctrica, o en la planta o en las líneas de conducción, nosotros tenemos que volver a echarlos a andar para sacar agua”.
El titular del SIMAS, dijo que el organismo mientras tanto, con base a la información detallada que oportunamente le ha proporcionado la Comisión del Agua en relación con ASL, continúa trabajando con la intención de mejorar la eficiencia de sus operaciones, para lo cual por ejemplo se han hecho acciones de sectorización en la red de conducción mediante cierre de circuitos y se ha puesto especial atención en la detección y reparación de fugas, especialmente en las tuberías principales, esto mediante el uso de tecnología digital que ya ha permitido recuperar de seis a ocho litros de agua por segundo que simplemente se perdían.
Al mismo tiempo, se busca avanzar en la cobertura de la micro-medición del agua que se distribuye en la ciudad, donde la instalación de 70 mil medidores en los últimos años permitió elevar del 40 al 54 por ciento la eficiencia de facturación y cobro del agua inyectada a la red.
Se refirió a que actualmente cuentan con medidores alrededor de 120 mil de los casi 220 mil usuarios con los que cuenta el SIMAS, y se tiene previsto instalar 20 mil más en el transcurso del presente año.