La aplicación de pastillas de cloro en charcas con la finalidad de neutralizar aquellos microorganismos que pueden propiciar trastornos gastrointestinales y otros problemas de salud, es solo parte de una serie de acciones que a favor de la prevención de riesgos sanitarios se realizan ya en el área de la colonia Santiago Ramírez afectada por una severa inundación.
Es personal de la Jurisdicción Sanitaria VI el encargado de realizar desde el martes pasado este trabajo, organizado en brigadas que recorren la zona anegada y los alrededores.
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Esta estrategia se mantendrá en fase intensiva hasta que baje el nivel del agua, para luego continuar con otras acciones complementarias, según lo dio a conocer José Luna Riojas, coordinador de Regulación y Fomento Sanitario en la Jurisdicción VI.
El funcionario explicó que además de la aplicación de hipoclorito de sodio en charcas, en las áreas afectadas se monitorean las redes de distribución de agua potable a fin de constatar que el líquido no haya sido alcanzado por ningún tipo de contaminación y sea apto para el consumo humano.
También, dijo, se realiza la distribución de dotaciones de plata coloidal para que la gente aplique en el agua de consumo humano, y se instruye a favor de un uso adecuado.
Al mismo tiempo, personal médico y de enfermería adscrito al área de epidemiología, se encarga de brindar atención a los habitantes del sector que así lo demanden, y de identificar de manera específica el tipo de enfermedades que hay que combatir desde la prevención.
Cabe señalar que una vez que baje el nivel del agua y queden los sedimentos de la inundación, las medidas emergentes continuarán con la aplicación de cal, igualmente para anular la presencia de microorganismos nocivos.
