En distintos sectores de la ciudad, pero con una mayor afectación en colonias ubicadas en la zona norte, el agua potable volvió a escasear durante la noche del miércoles debido a interrupciones en el suministro de energía eléctrica, así como debido a algunas variaciones de voltaje.
En esta ocasión, fueron los equipos de bombeo de por lo menos 25 pozos de extracción los que dejaron de funcionar temporalmente debido a la falta de electricidad, ante la serie de apagones que tuvieron una duración de entre una y cuatro horas.
Como ya ha ocurrido en anteriores ocasiones, la situación ameritó que el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (SIMAS) activara el protocolo de distribución emergente de agua mediante camiones-pipa, a fin de resolver en lo inmediato la demanda de la población en las zonas afectadas.
El regidor Luis Jorge Cuerda Serna, presidente de la Comisión del Agua del Cabildo e integrante del Consejo Directivo del SIMAS, quien informó lo anterior, explicó que en esta ocasión los apagones e intermitencias en el flujo de la energía se presentaron en el poniente, el oriente y el norte de Torreón, pero fue en este último sector donde se vivieron las principales complicaciones, sobre todo porque ahí tardó más en reanudarse el suministro eléctrico.
Comentó que precisamente en el norte, hubo colonias en las que la falta de energía se solucionó hasta alrededor de las seis de la mañana.
Recordó que después de un apagón o de una baja sensible de voltaje, luego de que el suministro de energía se normaliza no basta con solamente reencender el equipo de bombeo que resulta paralizado.
Se refirió a que en tales casos se deben realizarse procedimientos técnicos que incluyen la purga y presurización de las tuberías de conducción para que el servicio de agua se restablezca por completo, lo cual puede tardar una o más horas.
Respecto a la distribución emergente de agua en pipas que se activó en esta ocasión, dijo que de esta manera se buscó cubrir principalmente las necesidades de uso para el funcionamiento de aparatos de refrigeración a base de aire lavado, que resultan imprescindibles ante el intenso calor que se ha vivido en los últimos días en la región.