Se volvió a activar la alerta para el sector educativo en la ciudad de Torreón, ante los hechos ocurridos en una primaria, en la cual un alumno disparó un arma de fuego, presuntamente de manera accidental; sin embargo, esto hace recordar a toda la sociedad lagunera, otros casos lamentables como lo ocurrido en enero de 2020 cuando un alumno provocó un tiroteo en el Colegio Cervantes.
En aquel momento, fueron varios los protocolos que se comenzaron a implementar, no solo en ese colegio, sino en otros particulares e instituciones de carácter público en la región, temerosos a que se repita un hecho violento de esta magnitud, que como en este caso, cobró la vida de una maestras y seis personas más resultaron heridas, incluyendo niños.
¿Qué protocolos se implementaron?
Cuando ocurrió ese hecho, se activó el Protocolo Naranja, el cual se refiere a la atención del estrés postraumático; se apoyó a alumnos y docentes del colegio, el cual se mantuvo cerrado por un tiempo.
Se solicitó apoyo de personal capacitado en psiquiatría y en manejo de crisis; se brindó apoyo emocional de los docentes y alumnos, además de que se mantuvieron en alerta los números de emergencia y la línea de vida, al igual que el Centro Integral de Salud Mental (Cisame).
Al regreso a las clases, se implementó de manera cotidiana y obligatoria el Operativo Mochila y algunas escuelas y colegios de la región optaron por llevar a cabo la misma medida por seguridad.
También se crearon grupos de trabajo para la detección de síndrome de estrés postraumático a los alumnos que presenciaron los hechos.
Faltan medidas efectivas en escuelas
Aunque se activan las alertas cuando ocurre algún incidente en escuelas del municipio de Torreón, no hay protocolos establecidos y adecuados en las instituciones.
Algunas medidas que se han tomado en instituciones educativas, tras pasar por algún hecho violento ya sea en esa escuela o en otras de la ciudad, se ha implementado el operativo mochila para revisar lo que los alumnos ingresan a la escuela; sin embargo, son aleatorios y no han sido constantes, además de que no se llevan a cabo en todas las instituciones.
En el caso que se registró recientemente en la primaria Año de Juárez, los padres de familia se enteraron hasta que recogieron a sus hijos en la salida; se llamó a Seguridad Pública, Pronnif y fiscalía, quienes acudieron en poco tiempo, pero a los padres se les envió un comunicado por la tarde.
Las autoridades académicas sólo informaron que tanto el arma como los dos alumnos involucrados fueron resguardados. Luego indicaron que al día siguiente, se realizaría el Operativo Mochila Sana y Segura.
Alertas en el 2024
Otros casos en los que se ha activado la alerta en centros de estudio y entre padres y maestros, han llevado a tomar medidas preventivas, que resultan temporales y no son constantes.
En enero del presente año, el Colegio Inglés de Durango campus torreón fue evacuado por una presunta amenaza de un tiroteo que hizo un alumno de sexto de primaria; esto alarmó a los padres de familia, quienes de inmediato acudieron por sus hijos y exigieron protocolos y medidas, que el colegio no implementó de inmediato.
Se inconformaron porque lejos de actuar o de contar con un protocolo de actuación en este sentido, únicamente trataron de ocultar lo sucedido para tratar de evitar que se diera a conocer. Posterior a este suceso, solo se realizó por un tiempo el programa Operación Mochila, se contrataron más guardias de seguridad y se tiene mayor control de accesos en el plantel, además de canalizar a los alumnos que consideren necesario, al área de psicología.
En octubre, un mensajes con una amenaza de tiroteo en la secundaria número 17, Carlos Pellicer, de la colonia Villas Universidad, también puso en pánico a la comunidad estudiantil, además de que se percataron de la presencia de hombres armados caminando por el sector.
La Dirección de Seguridad Pública Municipal, a través de la Unidad Especializada en Atención a Víctimas de Violencia Familiar y Género, atendieron el reporte realizado por las autoridades escolares.
Se activó el protocolo correspondiente y se descartó el riesgo; pidieron evitar seguir esparciendo el mensaje por los demás alumnos y los oficiales ofrecieron una charla a los estudiantes y maestros para evitar este tipo de mensajes falsos que solo provocan alarma entre la población.