Durante los primeros 11 días de campaña, los cuatro candidatos a la presidencia de la República gastaron 124 millones 142 mil pesos en sus actividades, reportó el Instituto Nacional Electoral en su página dedicada a la fiscalización del proceso electoral.
Destaca que el candidato de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya Cortés, generó gastos por 93 millones 102 mil millones de pesos, por lo cual es quien acapara los egresos ante el INE.
Entre los avisos de contratación del queretano destacan los hechos con Publicity Adglow de México por 34.8 millones, con Ojiva Consultores con 11.6 millones y con Tent Servicios Integrales por 6.1 millones de pesos.
En cambio, el candidato de la coalición Todos por México, José Antonio Meade Kuribreña, tiene egresos por 21 millones 869 millones de pesos desde el 30 de marzo hasta el 9 de abril, fecha de la última actualización de los reportes de fiscalización de la campaña.
En el caso del abanderado del PRI, el proveedor al que le ha dedicado más gasto es a la comercializadora Grupo Samfer, a la cual otorgó un contrato por cuatro millones 170 mil pesos.
En tercer lugar de gastos se encuentra la candidata independiente, Margarita Zavala Gómez del Campo, quien lleva gastos por 10 millones 270 mil pesos en esta decena de días.
A diferencia de los anteriores independientes , la expanista no ha informado quiénes son sus proveedores.
Finalmente, Andrés Manuel López Obrador es el candidato más opaco, pues pese a que lleva días con actos públicos sigue sin registrar ni un sólo peso en el Sistema Integral de Fiscalización del INE. Por este hecho, el tabasqueño estaría en el supuesto de una sanción por omisión de reportes de gastos, ya que la ley lo obliga a reportar gastos tres días después de hacerlos.
Lo anterior no significa que los otros tres candidatos estén libres de irregularidades. Por ejemplo, Meade Kuribreña, a pesar de que ya gastó más de 21 millones de pesos sigue sin reportar ingresos, mientras que Zavala tiene ingresos por nueve millones de pesos cuando ya erogó 10 millones, algo similar a lo que le sucedió en su campaña para recolectar firmas donde en su informe final le faltó demostrar de dónde obtuvo 10 millones que gastó.