La mañana de este jueves el periódico Fuerte Hood del estado de Texas, informó sobre el hallazgo de restos humanos que podrían ser de la soldado estadunidense con raíces mexicanas Vanessa Guillén, desaparecida al interior de las instalaciones militares poco después de haber denunciado acoso sexual al interior de las fuerzas armadas.
La información la proporcionó la abogada Natalie Khawan, quien representa a los familiares de Guillén. La base militar informó que localizó los restos en la rivera de un río cercano y que podrían ser de la soldado de 20 años, hija de inmigrantes mexicanos.
Cuando se informó del hallazgo, un compañero militar de Vanessa huyó de la instalación militar a su casa y poco después se suicidó, la oficina de Investigaciones Criminales del ejército informó que “mientras unos oficiales intentaban establecer contacto con el sospechoso, éste les mostró que estaba armado y descargó el arma contra sí mismo, sucumbió de una herida de bala autoinfligida”. Esa misma oficina informó que arrestó a un segundo sospechoso, un civil, esposo de una soldado de la base del Fuerte Hood.
Guillén, de 20 años de edad, fue vista por última vez usando una camiseta negra y pantalones púrpura, en un estacionamiento de la base. Las autoridades hallaron las llaves de su vehículo, su billetera y tarjeta de identificación en la armería de la base donde ella había estado haciendo ejercicio, pero su teléfono todavía no se ha encontrado.
Khawam señaló que se tiene entendido que la joven "fue hostigada sexualmente por un par de sus superiores en dos ocasiones diferentes de las cuales ella dio cuenta a la familia, sus amigos y sus colegas".