Torreón, Coahuila.- Desde que nacieron, Magi Valeria y Aitana Ximena, de cinco y siete años de edad, respectivamente, han estado bajo el cuidado de sus abuelos María Juana González López y Juan Manuel González Martínez.

Las han alimentado, vestido y educado, además de brindarles todas las atenciones necesarias.

La madre de las menores se desentendió por completo y el padre va a verlas y las apoya económicamente de manera ocasional.

Él, llamado Hugo, de 36 años de edad, el fin de semana pasado le pidió a su mamá, María Juana, que se las prestara para estar un rato con ellas.

Pasó el sábado alrededor de las 13:00 horas y las llevó a su lugar de trabajo, una obra en construcción ubicada en el Paseo del Tecnológico y carretera a Mieleras, y a las 23:00 las encargó a una mujer, identificada como Jazmín, conocida suya, que las cuidara para ir a cobrar un dinero.

Al regresar ya no estaban, pues se había ido con las infantes.

Los abuelos fueron el domingo por sus nietas y él les comentó que no sabía nada de sus hijas.

De forma inmediata se inició una intensa búsqueda y se difundió el caso a través de las redes sociales, además de avisar a las autoridades y poner la denuncia.

Gracias a eso, una persona alertó a las autoridades que las vieron en la colonia Las Julietas, en donde personal de la Fiscalía de Coahuila las rescató y la presunta sustractora fue detenida durante la noche del lunes.

Actualmente, Magi y Aitana están en resguardo del Gobierno del Estado, en Casa Cuna.

María Juana y Juan Manuel solicitan a la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia (Pronnif) que se las regresen.

“No son mis nietas, para mí ellas son mi hijas porque siempre las he cuidado. Mi hijo no vive con nosotros, nosotros vivimos en Valle Oriente y él en Villas Zaragoza”, comentó la abuela.

“Mi hijo se llama Hugo, tiene 36 años de edad, tenía 15 días sin verlas y por eso dejamos que pasara un tiempo con ellas. A veces nos trae dinero para lo que necesiten las niñas”, mencionó.

Al respecto, la Pronnif informó que se está evaluando la situación para determinar quiénes son las personas más aptas para su custodia.

“Queremos que nos las devuelvan las extrañamos mucho, pues todos los días las atendemos”, externó María Juana.