Durante el transcurso del pasado fin de semana, se realizó un hallazgo trágico en las aguas turbulentas del río Bravo, donde el cuerpo de un inmigrante guatemalteco fue descubierto siendo arrastrado por la corriente, cerca de la rampa utilizada por las autoridades para las lanchas.
El sheriff Tom Schmerber informó que agentes de Seguridad Pública de Texas hicieron el macabro descubrimiento alrededor de las 07:30 horas del día. De acuerdo con Schmerber, los documentos encontrados entre las pertenencias del fallecido revelaron que se trataba de Manuel Hernández, un hombre de 35 años de edad.
Tras el rescate del cuerpo, un juez de paz certificó su deceso en el lugar del hallazgo, mientras que el personal de una funeraria se encargó de transportar el cuerpo a sus instalaciones para los procedimientos correspondientes.
Con esta tragedia, se suma un nuevo nombre a la lista de víctimas mortales entre los migrantes que intentan cruzar la frontera. Según el consulado de México en Eagle Pass, el número de fallecidos desde enero hasta la fecha asciende a 39.
El trágico suceso de Manuel Hernández también marca el fallecimiento número 74 registrado en lo que va del año en la frontera entre Coahuila y Texas, subrayando los riesgos constantes que enfrentan aquellos que buscan una vida mejor al cruzar estas aguas peligrosas.
