Matamoros, Coahuila. - Hace apenas menos de un día, la Fiscalía de Personas Desaparecidas Región Laguna acababa de emitir la ficha de búsqueda de Carlos Gildardo Mejía Aldaba y se pidió el apoyo de la sociedad para dar con su paradero.
Fue visto por última vez el 28 de febrero en Matamoros.
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Lo describieron con 46 años de edad, 1.72 metros de estatura, complexión delgada, tez blanca, ojos cafés oscuro y grandes, cabello crespo color negro, cabeza ovalada, labios delgados, boca mediana y dientes frontales superiores quebrados.
Un tatuaje de la medalla de San Benito en el lado izquierdo del pecho, fue su seña particular.
La tarde de este martes, unos trabajadores de un establo vieron flotando un cuerpo en un estanque ubicado en el ejido Congregación Hidalgo, de Matamoros.
De manera inmediata dieron aviso a las autoridades y las características coincidían con el reportado como desaparecido.
En los alrededores había prendas de vestir con sangre afuera del estanque, pero al sujeto no se le apreciaban, a simple vista, huellas de violencia.
Fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) para la necropsia de ley.
Después se confirmó que se trataba de Carlos Gildardo Mejía Aldaba.
