Luego de que de manera totalmente irresponsable y peligrosa participaban en una competencia callejera de arrancones a bordo de motocicletas, sin portar para ello casco ni ninguna otra protección personal, fueron interceptados por agentes de tránsito y policías municipales tres menores de edad, casos que fueron turnados ya a la Procuraduría para Niños, Niñas y la Familia (PRONNIF) para su inmediata intervención.
Fueron interceptados también otros dos conductores mayores de edad, como resultado del operativo que se instrumentó la noche del pasado lunes para atender un reporte ciudadano en el que con preocupación se alertaba a las autoridades ante la presencia de varias motocicletas circulando a exceso de velocidad sobre la calle de los Vagones paralela al parque Línea Verde.
La respuesta no se hizo esperar con un operativo en el que la Dirección de Tránsito y Vialidad contó con el respaldo de personal de Seguridad Pública, y que al activarse permitió sorprender en el lugar, cuando intentaban darse a la huida, a cinco de los motociclistas que participaban en los arrancones, entre ellos dos menores de 17 y uno de 15 años de edad.
En consecuencia, los cinco vehículos fueron asegurados como garantía del pago de las multas a las que se han hecho acreedores sus conductores en calidad de infractores, y quienes además, para recuperarlas, deberán demostrar su propiedad, en el entendido de que por lo que respecta a los menores de edad otra condición más es que sus padres se presenten ante la PRONNIF para responder por su conducta y comprometerse a tomar las medidas que sean pertinentes para evitar que reincidan.
El titular de la Dirección de Vialidad y Movilidad Urbana, Luis Morales Cortés, quien informó lo anterior, hizo notar que estos son los tres primeros casos de conductores de motocicletas menores de edad que se turnan a la PRONNIF, cuya intervención se espera abone directamente a favor de los esfuerzos que se realizan para prevenir percances viales de lamentables consecuencias.
Se entiende, dijo, que en el caso de los menores conduciendo uno de estos vehículos que pueden alcanzar muy altas velocidades, es evidente que alguna persona adulta se los permite, lo que implica una evidente omisión de cuidados por parte de los padres de familia, que son por lo general los propietarios de las motocicletas.
Se entiende que el uso de una motocicleta implica un nivel de riesgo para los propios adultos, aún más para un menor que no tiene el conocimiento ni la experiencia en su manejo.
De acuerdo con los funcionarios este tipo de acciones se suma a otros esfuerzos que se realizan para tratar de evitar que sigan ocurriendo accidentes de tránsito en los que se vean involucrados jovencitos, como el ocurrido la noche del lunes en la calzada Emilio Carranza y calle Nicaragua de la colonia Salvador Allende, donde sufrieron fracturas el conductor y su acompañante de 16 y 14 años de edad, respectivamente, o el sucedido hace un par de semanas en la colonia Moderna, donde un conductor de 15 años y su acompañante de 10 resultaron severamente lesionados.