Torreón, Coahuila. – El pasado 4 de septiembre se cumplieron 3 años de la desaparición de Yajaira Sugey Parra Hernández, quien fue vista por última vez en Mazatlán, Sinaloa, a donde viajó con David Garay Quiñones, del que tampoco se sabe nada.
En esa fecha, pero del 2021, alrededor de las 19:00 horas, la joven torreonense, de entonces 20 años de edad, se comunicó vía WhatsApp con su mamá, Alma Hernández, para avisarle que ya venía de regreso a la Comarca Lagunera, pero nunca llegó.
“Ellos salieron rumbo a Mazatlán el día último de agosto y llegaron el primero de septiembre. Yo no quería porque no conocía al muchacho, nunca lo había visto, pero ella me insistió. Desde el inicio yo tenía un mal presentimiento”.
“Subió unos estados en su WhatsApp donde se veía que ya andaban allá y el 4 fue cuando desapareció, cuando se supone que se regresaban”.
Se hospedaron en el hotel Aló, ubicado en la Zona Dorada, lugar que confirmó su presencia, al igual que las cámaras de vigilancia.
Se trasladaban en un automóvil Volkswagen Jetta MK6, color blanco, modelo aproximado 2014-2016 y con placas de circulación FLR-62-78.
A decir de Alma, alguien la tiene contra su voluntad y bajo amenazas, pues en repetidas ocasiones le han dicho que anda trabajando en lugares de apuestas y venta de alcohol y drogas, tanto en el puerto sinaloense como en Culiacán.
Todas las pistas las ha seguido, pero ninguna la ha llevado a dar con su paradero.
“Perder a una hija te cambia la vida por completo, para mal. Ahora solo vivo para encontrarla. No pierdo la esperanza porque no se ha encontrado de otra forma que no quisiera”.
“La voy a seguir buscando hasta el último día de mi vida. A la persona que la tenga le pido que se toque el corazón y me la regrese, y a quien sepa dónde está le pido que me diga”.
La familia de David Garay, de 24 años, poco hizo por buscarlo y menos colabora con las investigaciones.
Sugey mide 1.62 metros de estatura, pesa 58 kilogramos, es de tez blanca, tiene un lunar de lado derecho debajo del labio inferior, tiene un tatuaje de una serpiente en el tobillo del pie izquierdo y vestía pantalón de mezclilla y una blusa verde tipo bikini.