Torreón, Coahuila. – El pasado mes de diciembre, una lagunera, identificada como Alejandra Reed, salió de Torreón por vacaciones con su familia y dejó a sus mascotas encargadas en un “hotel canino”, como se anunció el establecimiento.
De esa manera, llevó por primera vez a “Teo” y a “Simona”, confiando en que se los cuidarían en “Doggy’s Room”, ubicado sobre la carretera Torreón – San Pedro, saliendo de Villas del Renacimiento.
Sin embargo, al regresar a la ciudad, recibió muerto a “Teo”, que era de la raza yorkshire terrier.
“Me dijeron que había muerto por una disputa de perros pequeños, en la madrugada, pero traía mordidas de perros grandes”.
“También me enteré que por iniciativa de “Doggy’s Room” mandaron a mi perro sin vida a un lugar que se dedica a incinerar mascotas y donde se logró llegar por el cuerpecito para así iniciar con profesionales la necropsia, la cual nos arrojó que no fue un evento en la madrugada y fueron mordeduras de un perro grande”.
Ante la situación, ya se interpuso la denuncia correspondiente, por lo que esperan que se haga justicia.
“La denuncia se interpuso por la vía administrativa, que es la manera más fácil de que puedan cerrar el lugar y eso es lo que estoy pidiendo. Y hago público esto para que más gente se entere y no vuelva a pasar”.
Al respecto, Defensoría Animalista Laguna también exigió que se proceda contra dicho negocio.
“Queremos justicia y hacerle saber a toda la sociedad que sus perritos corren mucho peligro en ese lugar”.