Torreón, Coahuila. - El director de Comunicación Social de la Diócesis de Torreón, presbítero Rafael López Solís, y el jefe de la Policía Municipal, comisario César Perales Esparza, se reunieron para hablar sobre la problemática del robo en las iglesias.

Y es que han sido constantes los hurtos en los centros religiosos, en los que los "amantes de lo ajeno" se han llevado cableado eléctrico, tubería de cobre, lámparas led, campanas y hasta cenizas de difuntos.

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El último caso se registró el 31 de julio en la Parroquia de Nuestra Señora de Fátima.

"Nos dimos cuenta del robo de tubería de cobre que alimenta los aparatos de aire de la Iglesia de Fátima. Aunque no fueron muchos metros de cobre lo que se robaron, es más el costo de la reparación y afectación, ya que dejaron a toda la iglesia sin agua".

No obstante, señaló que algunos templos han tenido que invertir en levantar tanto las bardas que hasta "ya parecen Ceresos".

Es por eso que el titular de la Policía fue a visitarlo, a fin de conocer de forma directa la situación, intercambiar propuestas y armar una estrategia que aporte resultados. De hecho, realizaron un recorrido a pedestre por los sectores donde están las iglesias.

En ese sentido, Perales Esparza calificó la reunión como muy productiva:

"Tuvimos muy buen acercamiento con el sacerdote y compartimos información, las estrategias las hicimos desde ese día también, esperamos que haya buenos resultados. Nos enteramos que es un complejo religioso, aunque disperso, abarca siete capillas, que son las que vamos a apoyar. Para ello, vamos a estar en constante comunicación con él para que nos dé la radiografía conforme vaya avanzando la situación de la vigilancia".

De igual manera, se tomó la decisión de juntarse cada 15 días bajo el objetivo de revisar la incidencia y mejorar los operativos de prevención y vigilancia.

Por su parte, López Solís agradeció la disposición del responsable de la seguridad en la ciudad.

"Compartimos inquietudes en torno a la seguridad y a los hechos delictivos que se han presentado en nuestra comunidad parroquial y en este sector de la sociedad. Creo y pienso, que es importante el diálogo con los actores de la sociedad para buscar el bien común de nuestra comunidad".