Una mujer de la colonia Ampliación La Rosita ayudó a su vecina en labores de parto y trajo al mundo a un bebé que nació de manera inesperada.
“Yo no soy médico, no sé como traer a un bebé a este mundo, pero lo que sí sé, es que soy mamá y me guié por mi instinto”, dijo.
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Los hechos ocurrieron a las 20:35 horas de este martes y se reportó al Sistema Emergencia 911, a la cual les solicitaron la presencia de los servicios de emergencia de la Cruz Roja.
Cinthia Guadalupe de la Cruz, de 32 años, entró en pánico cuando su bebé estaba apunto de nacer, ya que se le reventó la fuente mientras estaba en su casa.
Asustada y sin saber que hacer, pidió auxilio a gritos. Saira López, de 32 años, quien es vecina de Cinthia, escuchó el llamado y sin dudarlo, se metió a la vivienda para saber que sucedía.
Al entrar a la casa se llevó la gran sorpresa, que Cinthia estaba dando a luz, por lo que de inmediato la auxilió para ayudarla con el alumbramiento.
En ese momento, Saira vivió de una de las experiencias más hermosas de su vida y a la vez tan riesgosas. Explicó que cuando vio la cabecita del bebé, que estaba atorada en el conducto vaginal, se puso muy nerviosa, por lo que le dio mucho miedo.
Enfatizó que aún así se atrevió a sacar al bebé y afortunadamente lo sacó del vientre de su madre.
“Hubo un momento en que el bebé no respiraba, estaba morado y no teníamos nada con que sacarle las flemas, por lo que los vecinos se movilizaron a conseguir saca flemas”, detalló.
Manifestó que logró abrirle la boquita y ponerlo hacia abajo hasta que soltó el fuerte llanto, mientras que su mamá estaba llena de terror porque tardó en llorar.
Argumentó que por fortuna todo había salido bien, por lo que esperaron a los paramédicos de la Cruz Roja, quienes atendieron a la madre a su pequeño bebé que fue un varoncito, el cual nació en óptimas condiciones de salud.
Ambos fueron trasladados a un hospital de la localidad, donde quedaron internados en el área de urgencia y bajo cuidados intensivos.
